martes, 18 de septiembre de 2007

Solo 500 pueblos catalanes vigilan la contaminación lumínica

Cinco millones de catalanes tienen problemas para ver las estrellas, contemplar el cielo en una noche de luna llena o visualizar fenómenos astronómicos como la lluvia de las Perseidas. Son los cinco millones de catalanes que viven en el área metropolitana de Barcelona. Y las nubes no son siempre lo que cubre el cielo. El problema está en la contaminación lumínica. Miles de bombillas, reflectores e iluminaciones variopintas apuntan hacia lo alto e impiden a los ojos gozar de la visión del cielo. Catalunya ha iniciado una ofensiva --tímida en opinión de algunos-- para frenar esa contaminación, pero los resultados no son todo lo optimistas que se pudiera pensar.Los 946 municipios catalanes tienen tiempo hasta el próximo 31 de diciembre para presentar un plan de adecuación a la normativa que limita la iluminación exterior y que está contemplada en el decreto 2/2005. "Calculamos, por las subvenciones solicitadas, que unos 500 ayuntamientos ya tienen en marcha ese plan, pero el resto, me temo que no", explica Mercè Tarradellas, responsable del tema en la Conselleria de Medi Ambient.
EL SECTOR PRIVADO. Adecuarse a la normativa no es únicamente cambiar el alumbrado público e instalar bombillas de bajo coste, sino situarlas adecuadamente --que iluminen el suelo y no el cielo-- y lo más complejo: intervenir sobre la iluminación de las empresas privadas. Los ayuntamientos deben concretar antes de fin de año qué luces pueden tener los edificios singulares, polígonos industriales o grandes zonas comerciales, entre otros. "Resolver como se actúa sobre el sector privado será probablemente lo más complejo para los ayuntamientos", admite Tarradellas.Una vez hecho y presentado el plan de adecuación, los ayuntamientos tendrán aún dos años más --hasta finales del 2009-- para ejecutar las obras que sean necesarias. El objetivo es, además de que pueda verse el cielo, que se ahorre entre un 20% y un 40% del gasto energético en alumbrado público.
UNA LEY CORTA. La asociación que más esfuerzo ha hecho en la última década en Catalunya para conseguir que se regule la iluminación exterior es sin duda Cel Fosc. Su vicepresidente, Pere Horts, tiene constancia de que muchos ayuntamientos ya han empezado a ponerse las pilas, pero no lo suficiente. "Algunos han ido cambiando el alumbrado público". "Pero ese no es el problema más grave en cuanto a contaminación". "La cuestión más difícil es el ámbito privado, donde no se ha hecho prácticamente nada", dice Horts. "Por eso --prosigue-- la contaminación lumínica, globalmente, ha aumentado porque el urbanismo ha crecido de forma desmesurada".Este profesor opina que la ley contra la contaminación lumínica aprobada en el 2001, aunque el decreto date del 2005, "ha quedado absolutamente obsoleta antes de ponerse en marcha, porque no preveía el crecimiento urbanístico que ha habido a partir del 2001". A su parecer, aunque los ayuntamientos hagan los deberes, cambien el alumbrado y logren rebajar el derroche de luces del sector privado, "estaremos igual que estábamos antes de la ley".Cel Fosc propugna --como ya se ha hecho, por ejemplo, en la Lombardía-- la emisión cero; es decir, que ninguna iluminación vaya más allá de la altura de los edificios. Medi Ambient no va tan lejos. Solo se compromete a que antes de fin de año esté hecho el mapa de contaminación lumínica de Catalunya, donde cada punto del territorio tendrá marcado su potencial de emisión.
MERCÈ CONESA. El periodico.com. BARCELONA. . 3/09/2007

Asturias reluce más que su cielo

Asturias alumbra tanto que está empezando a dejar de ver su cielo. La región, y especialmente el área central, se encuentran entre las zonas más afectadas por el fenómeno de la contaminación lumínica, un nuevo tipo de polución que impide a los observadores distinguir las estrellas del firmamento. El problema consiste, en líneas generales, en un exceso de luz en las poblaciones que genera un resplandor que hace invisible el cielo. En las grandes ciudades del mundo es común observar por la noche un gran globo de luz que se eleva varios kilómetros por encima de los edificios. Se trata de un fenómeno que se produce igualmente en el área metropolitana asturiana, debido a la concentración de núcleos de población medianos en pocos kilómetros, y a un desarrollo industrial cada vez más acusado en esta parte de la región. Todo ello acompañado de cada vez más autovías que vertebran el territorio y que están iluminadas «en exceso y mal», advierten los expertos en este tipo de contaminación. Así las cosas, y en vista de que Asturias reluce ya a vista de satélite como lo pueden hacer Madrid y la zona centro del país, Cataluña, País Vasco, Andalucía, el Levante o la cornisa atlántica, los expertos consideran que ha llegado la hora de tomar medidas para reducir este tipo de contaminación, que no sólo afecta a la visión nocturna de la bóveda celeste, sino que resulta muy dañina también para algunas especies animales nocturnas, y para muchas aves migratorias que hasta ahora tenían las estrellas como referencia en sus viajes. La comunidad canaria es pionera en el trabajo para conseguir un cielo limpio de reflejos que deje las estrellas al descubierto. Cipriano Marín es el coordinador de la iniciativa «Starlight» («luz de las estrellas»), un programa que promueve la Unesco para luchar contra el fulgor que desprenden las ciudades ocultando el cielo, y para reivindicar la calidad del cielo nocturno y el derecho a observar las estrellas. Desde este programa de acción, Marín propone algunas medidas que se podrían aplicar en el ámbito asturiano para llegar a tener un cielo limpio de impurezas brillantes, porque la situación comienza a ser alarmante. «En el Norte, aunque el tiempo esté despejado, un observador puede llegar a ver en la actualidad, y con suerte, únicamente un centenar de estrellas, de las 3.000 que veían nuestros abuelos», asegura este experto. En una región como ésta, con un gran potencial en sus paisajes y en el sector turístico, la protección de sus cielos nocturnos, «el mayor espectáculo gratuito que existe», se hace indispensable, señala el experto. Por ello, habría que comenzar a aplicar algunos de los sencillos principios del «Starlight», que promueve un uso racional de la iluminación artificial, para minimizar el resplandor que provoca en el cielo. Marín explica que existe ya tecnología suficiente para evitar este derroche de luz que ciega los cielos, y sólo se trata de una cuestión de «voluntad y saber elegir». Como ejemplo más palpable propone la utilización de lámparas de sodio, que no contienen elementos nocivos para el medio ambiente y que no generan tanta luminosidad. Las grandes superficies comerciales del área metropolitana o los complejos deportivos de la región podrían satisfacer sus necesidades de iluminación con este tipo de luminarias «que están al alcance de todo el mundo que las quiera utilizar», sostiene el coordinador del «Starlight». En el caso de las autovías y carreteras de la región, el derroche de luz es más evidente, apunta Marín, quien recuerda que no es necesario colocar una farola cada pocos metros en incorporaciones o travesías. Otro tipo de medidas podrían ser tomadas directamente por los ayuntamientos asturianos, como por ejemplo la supresión de las farolas de globo, que proyectan la luz en todas las direcciones cuando en realidad sólo deben alumbrar a los viandantes. De momento, sólo Canarias dispone de un espacio limpio para la observación del cielo desde la isla de la Palma, pero muchas otras provincias están empezando a trabajar en la protección de un espacio «en el que hasta ahora no se estaba pensando demasiado». Córdoba, Valencia, Sierra Nevada, Cataluña o países como la República Checa, Suiza o Italia han comenzado a tomar medidas en este sentido, si bien «cualquier Ayuntamiento u organización puede sumarse a los principios del "Starlight"», señala Marín.
Luján PALACIOS. Lne.es. Oviedo. 19/08/2007

Los británicos sancionan las agresiones al medio nocturno

Asturias podría tomar como ejemplo las medidas de protección que ya se están tomando en Inglaterra, el ejemplo que propone Cipriano Marín para comenzar a movilizarse por un cielo libre de resplandores. Los británicos han logrado que se incluya la contaminación lumínica dentro de la ley de protección del medio rural en el Gobierno inglés. Las agresiones al medio nocturno se consideran contaminación grave, como una falta penal, de tal manera que quien incumpla ciertas normas de consumo energético, es sancionado. Éste debería ser el último paso posible, subraya Marín, pero la filosofía de la ley podría suponer un buen punto de partida para Asturias, según este experto, con el fin de preservar nuestros ricos paisajes; no sólo los diurnos, sino también los nocturnos.
L. PALACIOS. Lne.es. Oviedo. 19/8/2007

La ordenanza contra la contaminación lumínica, bloqueada

GRANADA. El dicho "cuanta más luz mejor" no lleva implícito el significado de mayor visibilidad o seguridad, sino que la excesiva iluminación en Granada lleva consigo un efecto negativo conocido como contaminación lumínica. Ante esto, la portavoz de IULV-CA, Lola Ruiz Domenech, ha exigido que se elabore sin más demora una ordenanza de "cielo oscuro", ya que cuando su grupo presentó esta moción en el pleno de noviembre pasado, fue aprobada por unanimidad.
Y es que el cielo es cada vez menos oscuro en las noches granadinas. El brillo y resplandor del excesivo alumbrado público y exteriores hacen que los ciudadanos disfruten poco de las estrellas. Pero no es sólo porque la vista del firmamento sea en la actualidad menos bella, sino por las consecuencias negativas que conlleva para el entorno, ya que el medio ambiente sufre una degradación significativa.
Dentro de la Península existen seis grandes zonas con una creciente contaminación lumínica: Levante, el centro de Madrid, Cantábrico-Valle del Ebro, Cataluña y "Atlántica" (desde La Coruña hasta Lisboa). La sensibilización al respecto fue en aumento desde la elaboración de la Carta en Defensa del Cielo Oscuro, en Lérida en 1994, y ya son varias las Comunidades Autónomas que han llevado a cabo diversas legislaciones y ordenanzas, como Cataluña, Islas Baleares, Navarra, Cantabria, Canarias o Murcia.
Aunque en Granada se están cambiando las luminarias con el objetivo de disminuir la excesiva emisión de luz, aún no se ha elaborado una normativa, y la calidad del cielo se ha deteriorado considerablemente en los últimos 20 años. La provincia granadina representa uno de los puntos más importantes de contaminación lumínica a nivel nacional. En Andalucía sólo es superada por la costa malagueña, Sevilla y Cádiz. Con respecto al resto de ciudades de la Península, la emisión contaminante está a la misma altura que Oviedo y Gijón, Santander y zonas del País Vasco. En el ranking, por delante de Granada sólo se encuentran Madrid, Lisboa, Oporto y algunos puntos de Levante.
Es una obligación conseguir que el cielo sea puro, de acuerdo con la Declaración Universal de los Derechos de las Generaciones Futuras, de la Unesco. Igualmente, al combatir la contaminación lumínica, se ayuda a disminuir el consumo energético, se protege a mamíferos y aves nocturnos, se reduce el deslumbramiento de los conductores, se colabora con la visibilidad nocturna del tráfico aéreo o marítimo y se permite la observación astronómica a profesionales y aficionados. Para ello es imprescindible decidir cuál es la zona que requiere luminosidad, evitando una iluminación dirigida al cielo; se debe sustituir el uso de lámparas de vapor de mercurio por las de vapor de sodio, cuyo consumo supone la mitad de las primeras y, lumínicamente, contaminan menos; y se recomienda una reducción de la luminiscencia a partir de medianoche a los niveles mínimos recomendados para la seguridad.
ANA I. PLEGUEZUELOS. Granada Hoy. 17/08/2007

IU pide "ya" una ordenanza de cielo oscuro contra la contaminación lumínica y por la eficiencia energética

Lola Ruiz Domenech recuerda que en el pleno de noviembre pasado fue aprobada por unanimidad una moción presentada por IULV-CA en la que se alcanzó el compromiso de elaborar en el menor plazo de tiempo posible una Ordenanza sobre protección del cielo oscuro La portavoz de IULV-CA en el Ayuntamiento de Granada considera que ha pasado un plazo de tiempo adecuado para que la ordenanza esté en marcha y espera que se presente para su aprobación en el pleno de septiembre. “Este es un compromiso recogido en la Agenda 21, que debería haberse llevado a cabo a lo largo de los cuatro años del mandato anterior”, afirma Lola Ruiz Domenech quien recuerda que como no fue así presentó una moción aprobada por unanimidad en el pleno de noviembre, por lo que exige que sin más dilación se haga realidad. Desde que se elaborara la Carta en Defensa del Cielo Oscuro, en Lérida el 30 de octubre de 1994, ha habido ayuntamientos que han elaborado normativas al respecto, "sin que hasta el momento el Ayuntamiento de Granada lo haya hecho", por lo que Lola Ruiz Domenech considera que “aunque en nuestra ciudad se están cambiando algunas luminarias con este objetivo, hay que ir más allá y sobre todo hay que cumplir con los compromisos acordados y recogidos tanto en la Agenda 21 Local como en los acuerdos plenarios del pasado mes de noviembre” . La contaminación luminosa (explica Lola Ruiz) consiste hace perder la oscuridad del fondo del cielo por efecto de la dispersión de luz artificial, por la existencia de bombillas de alumbrado inadecuadas que consumen excesivamente y sistemas de apantallado incorrectos que no impiden que la luz se proyecte hacia el cielo, de modo que las partículas en suspensión incrementan el proceso de dispersión de la luz, con el resultado de que sólo son visibles los astros más brillantes". En palabras de la portavoz municipal “la contaminación luminosa tiene solución: cambiar bombillas y pantallas inadecuadas, impedir las nuevas instalaciones deficientes y modificar las antiguas en la medida de lo posible, de forma que las inversiones realizadas se amortizan con el ahorro en el consumo”, y añade “con el tiempo, se gastaría menos electricidad y disminuiría la generación de residuos contaminantes en las centrales eléctricas, lo que en definitiva es perseguir un bien social común y preservar el derecho de las futuras generaciones a tener un medio ambiente mejor y un cielo más puro, de acuerdo con la Declaración Universal de los Derechos de las Generaciones Futuras (UNESCO)”. Para la edil de la organización de izquierdas uno de los objetivos fundamentales de este ayuntamiento, recogido en la Agenda 21 Local es “conservar, preservar y posibilitar que la ciudadanía disfrute y además se coopere en la eficiencia energética” y uno de los instrumentos "para ir avanzando en este camino es esta ordenanza", por lo que emplaza al alcalde a "que la haga realidad cuanto antes".
Granada digital. Granada.16/08/2007

La contaminación lumínica se evitará instalando reguladores de intensidad

Desde la Consejería de Medio Ambiente se han propuesto que los melillenses puedan disfrutar del firmamento y de acotecimientos astrológicos como la lluvia de meteoritos que se producen todos los años en el mes de agosto. Por ello, en los próximos meses el aérea que dirige Ramón Gavilán instalará varios reguladores de intensidad a lo largo de toda la ciudad, con el que no sólo se ahorra energía sino que también se evitará la contaminación lumínica.
Un proyecto financiado gracias al convenio firmado este año con el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE).El pasado fin de semana fueron los mejores días para observar las denominadas "Lágrimas de San Lorenzo" que provoca el paso del Planeta por la órbita del cometa Swift-Tuttle. Sin embargo, contemplar las Perseidas desde un núcleo urbano es cada vez más complicado debido al alumbramiento de las calles o la iluminación de los carteles publicitarios, provocando la denominada contaminación lumínica.En este sentido, desde la Consejería de Medio Ambiente se pretende reducir el problema en la medida de lo posible, mejorando el alumbrado con la instalación de unos equipos electrónicos que son programados para que a partir de una hora se baje "el flujo luminoso".Aun así, el máximo responsable del área aseguró que la actuación no abarcará a todas las calles, debido a que en muchos viales no están instaladas luminarias a las que se les pueda aplicar el regulador, como es el caso de los fluorescentes.Por ello la Consejería no sólo ha contemplado la instalación de los equipos para controlar la intensidad de luz de las farolas, sino también sustituir las que se encuentran en determinadas zonas, para que todas las que se controlan a través de una línea concreta sean del mismo tipo."Si metemos un reductor en una calle todas las lámparas tienen que ser iguales", subrayó el consejero sobre una de las medidas contempladas dentro del Plan de Acción estatal para el ahorro y la eficiencia energética.De todas formas, para el desarrollo del convenio suscrito con el IDAE aún habrá que esperar algún tiempo, ya que según aseguró Gavilán el proyecto se encuentran actualmente en fase de redacción.Problema poco abordadoSin embargo, Melilla no es la única región donde aún no se ha actuado poco para luchar contra la contaminación lumínica, ya que a día de hoy son pocas las Comunidades Autónomas donde se están desarrollando actuaciones o normativas al respecto.Este no es el caso de Islas Baleares, Navarra, Cataluña - donde ya en 2001 se puso en marcha la ley de ordenación ambiental del alumbrado para la protección del medio nocturno- o Canarias; donde tuvo lugar el pasado mes de abril la Conferencia Internacional en Defensa de la Calidad del Cielo Nocturno y el Derecho a Observar las Estrellas.Algunas medidas para evitar la contaminación lumínicaPara evitar que cuando se mire al cielo en cualquier núcleo urbano tan sólo se observe un reflejo anaranjado existen algunas medidas que se pueden aplicar por parte de las corporaciones locales como: el empleo de farolas apantalladas donde la bombilla este instalada horizontalmente -paralela al suelo- y que dirijan el flujo luminoso únicamente hacia abajo; usar preferentemente lámparas de vapor de sodio de baja presión (VSBP), que son más eficientes energéticamente; restringir el horario de la iluminación ornamental; limitar la iluminación de vallas y postes publicitarios y establecer un horario de apagado; prohibir los cañones de luz o láser; o reducir el consumo en horas de menor actividad mediante la bajada de tensión en la red pública o el apagado selectivo de luminarias.
Alfonso Nuñez. Melilla Hoy. 16/08/2007

Encuentro astronómico contra la contaminación lumínica

La asociación ecologista Centaurea ha organizado mañana en el Campo Azálvaro una jornada astronómica para sensibilizar sobre el problema de la contaminación lumínica.
A partir de las 21 horas, y con el apoyo técnico de los astrónomos del ´Grupo para la Protección del Cielo Oscuro´, se celebra una cita astronómica que en la edición del pasado año contó con la presencia de cerca de 300 participantes.

De forma previa a la observación del cielo, tendrá lugar una conferencia en el Centro Cultural de El Espinar, impartida por Francisco Pujol, presidente del ´Grupo para la Protección del Cielo´, sobre la contaminación lumínica.

La charla estará precedida por la proyección de un documental sobre las formaciones celestes, la localización y recomocimiento de sus singulares formaciones, con la que se pretende “introducir a los participantes en los fundamentos de la Astronomía y enseñarles la belleza del cielo estrellado".
´Por un Cielo Oscuro´Según Centaurea, la Junta de Castilla y León "debe cumplir sus promesas y aprobar una Ley de Protección del Cielo Oscuro, que permita contrarrestar el problema de la contaminación lumínica".

La actividad cuenta con la colaboración de experimentados astrónomos de Ávila y Madrid, que reivindican "evitar la contaminación lumínica que desprenden sistemas de iluminación ineficaces en ciudades, pueblos y carreteras, impidiendo la correcta observación de los astros”.

La jornada se enmarca dentro de la campaña internacional ´Por un Cielo Oscuro´. España destaca entre los países de la Unión Europea por sus altos índices de contaminación debido "a la pésima política de las Administraciones local, provincial, autonómica y central en esta materia”.

Destacan que hay un número creciente de pueblos de la vertiente castellano y leonesa en la Sierra de Guadarrama con un alto grado de contaminación lumínica y citan a El Espinar (Segovia), también a la “absurda iluminación” mediante grandes farolas en la carretera local SG-500, y a la urbanización de Los Angeles de San Rafael en El Espinar.

Por ello, Centaurea insta a todos los municipios a aprobar una ordenanza municipal para la prevención y reducción de la contaminación lumínica, y de esta forma “los Ayuntamientos reducirían significativamente el gasto público y contribuirían a recuperar el cielo estrellado”.
Rosa del Real. Aviladigital. 3/08/2007

PIDEN A LA JUNTA MEDIDAS CONTRA LA CONTAMINACIÓN LUMÍNICA

Lo hace Centaurea, coincidiendo con la celebración este sábado en el Campo Azálvaro de la VIII Jornada de Introducción a la Astronomía.Esta asociación ecologista solicitó a la Junta de Castilla y León que apruebe "con la mayor urgencia", una "eficaz" Ley de Protección del Cielo Oscuro, para "erradicar el problema de la contaminación lumínica en el territorio de la Comunidad". La petición la formula este grupo conservacionista, días antes de que este sábado el Campo Azálvaro, en la provincia abulense, acoja la VIII Jornada de Introducción a la Astronomía, con la participación de cientos de aficionados abulenses, madrileños y segovianos. Cetaurea recordó que España "destaca entre los países de la Unión Europea por sus altos índices de contaminación lumínica", aunque algunas regiones como Cataluña, Navarra o Canarias ya han legislado al respecto. En este contexto, lamentó que la Junta, "a pesar de haberse comprometido a ello en numerosas ocasiones, sigue sin legislar" sobre este asunto, lo que a su juicio demuestra su "poco interés en luchar contra el derroche de energía y contra el cambio climático". Por ello, los conservacionistas demandaron al Gobierno regional que "elabore y apruebe con la mayor urgencia una eficaz Ley de Protección del Cielo Oscuro, con el fin de erradicar en el plazo más breve posible el problema de la contaminación lumínica en el territorio de la Comunidad. Al mismo tiempo, consideraron que los ayuntamientos también "pueden jugar un papel muy importante en la reducción del derroche energético en general y de la contaminación lumínica en particular". Por eso, Centaurea propuso que los municipios aprueben una ordenanza municipal para "la reducción y prevención de la contaminación lumínica", así como un "plan para eliminar sus puntos más graves de contaminación lumínica, mediante sustitución de las luminarias existentes por otras no contaminantes lumínicamente", entre otras medidas. Según los ecologistas, si estas medidas se materializan, se conseguirá "recuperar el cielo estrellado", mientras los Ayuntamientos "reducirían significativamente el gasto público en iluminación y alumbrado público". La Asociación Ecologista Centaurea puso como ejemplo de malas prácticas en este sentido el municipio segoviano de El Espinar, donde existen varios puntos con contaminación lumínica entre los que citó las "grandes farolas tipo autopista de la carreta local SG-500" o "los alrededores de la piscina cubierta, mediante numerosas luminarias tipo 'globo'".
Avilared. Avila. 2/08/2007.

Arranca el plan municipal para ahorrar en el consumo de luz del alumbrado público

Dentro de las iniciativas del Ayuntamiento de Albacete para aplicar criterios de eficiencia y ahorro energético en la ciudad y reducir la contaminación lumínica, ayer se adjudicó un contrato para la aplicación de nuevas tecnologías en la red de alumbrado público.Con una inversión de 108.942 euros, se ahorrarán más de 300.000 kilovatios hora en el consumo municipal. Para conseguirlo se llevarán a cabo dos actuaciones. Por un lado se sustituirán las lámparas de 405 puntos de luz, cambiando los focos actuales, de vapor de mercurio, por otros de halogenuros metálicos, que aportan mayor rendimiento energético y reducen la contaminación lumínica. Las nuevas bombillas emitirán luz con tonalidad blanca, que mejora la visibilidad.Este cambio se llevará a cabo, en el plazo de un mes, en las farolas de 17 calles de Albacete -Boticarios, Concepción, Cura, Dionisio Guardiola, Gaona, Las Monjas, Martínez Villena, Méndez Núñez, Octavio Cuartero, Pasaje Enrique Massó, Plaza de la Constitución, Plaza Mayor, Plaza Periodista Antonio Andújar, Paseo de la Libertad, Rosario y Zapateros- y supondrá un ahorro energético anual de 76.230 kilovatios hora.ReguladoresPor otra parte, el Ayuntamiento, dentro de este mismo contrato, ha adjudicado la colocación de sistemas reguladores-estabilizadores de tensión que permiten adaptar la potencia lumínica a las necesidades reales de los diferentes tramos horarios nocturnos.Estos sistemas de control se instalarán en las cabeceras de línea que suministran la energía a las calles Casas Ibáñez, Carretera de Madrid, La Roda, Benavente y Paseo de Circunvalación, con un ahorro de 226.761 kilovatios hora anuales.
La Verdad. Albacete. 2/08/2007