jueves, 7 de junio de 2007

Plan Director Insular para el Control de la Contaminación Lumínica

Gran Canaria/ Dotar de contenido la Reserva de la Biosfera, desarrollar un órgano Gestor de la misma, poner en marcha un Plan Integral de Actuación y promocionarla en el exterior a través del Patronato de Turismo es una de las prioridades medioambientales de la candidata de Compromiso al Cabildo, Chiti Hernández, que considera que a día de hoy, la Reserva de la Biosfera “está desaprovechada”.
Hernández entregó esta tarde al presidente de la Federación de Colectivos Ecologistas Ben Magec, Heriberto Dávila, el decálogo de propuestas medioambientales de su Programa Electoral. Entre ellas, destaca la realización de un Plan Integral de Restauración y Protección del Paisaje natural, que incluye un Inventario y Catálogo del Patrimonio Natural y la elaboración de un Mapa de Identificación de Zonas necesitadas de actuaciones de reforestación y repoblación, así como el control de los vertederos ilegales. Además, Hernández propone que se elaboren tanto un Mapa de Emisiones Contaminantes (gases, ruidos y luz) como un Plan Director Insular para el Control de la Contaminación Lumínica, que siga las pautas marcadas en la Ley del Cielo.En el área de la educación, Compromiso considera vital potenciar las Aulas de la Naturaleza y redactar un Plan Director de Divulgación e Información ambiental continuado. Asimismo, se compromete a la aplicación de un Código de Buenas Prácticas Ambientales en el ámbito de la Administración Insular.Asimismo, Compromiso apuesta por elaborar un Mapa de Identificación de Elementos constitutivos del Patrimonio Cultural (yacimientos arqueológicos, acequias, pozos, fuentes, miradores...) y la implementación de acciones de protección del patrimonio cultural, con la creación de un Cuerpo Insular de Agentes de Vigilancia Patrimonial y Natural. Por último, Hernández se compromete a solicitar al Gobierno de Canarias una normativa más restrictiva en materia de reordenación de las antenas de telefonía móvil, “una cuestión en la que Compromiso siempre ha demostrado una gran sensibilidad y su solidaridad con los afectados por este tema”.

martes, 5 de junio de 2007

Bertamiráns reduce los niveles de contaminación lumínica

La plaza de Amaía, de Bertamiráns, luce desde hace unos días una nueva imagen nocturna tras el cambio de iluminación promovido por el departamento de Servizos Básicos. Con un coste que roza los treinta mil euros, el proyecto técnico ha servido para reducir los niveles de contaminación lumínica, que provocaban fugas de luz por el diseño de las farolas y el tipo de bombillas.El nuevo alumbrado ha mejorado la calidad y la cantidad de la luz, pese a suponer un ahorro energético gracias a la altura que se le ha dado a las nuevas farolas y a la distribución de los focos, que dirigen la luz hacia el suelo, reduciendo así la iluminación que entra en las viviendas y la que se desvía hacia el cielo. Además del cambio en el tipo de foco y de la instalación de farolas de mayor altura, la nueva luz, que se asemeja a la del día, también se consigue con una distribución distinta de estos focos.Para ejecutar este proyecto no fue necesario realizar grandes obras, ya que se aprovecharon los anclajes antiguos para instalar cinco nuevas farolas.

San Sebastian contra la Contaminacion Luminica

Debemos congratularnos por la iniciativa del alcalde de San Sebastián para reducir en 800 toneladas las emisiones de CO2 en la ciudad. Es un acierto el tomar en consideración acciones para prevenir el cambio climático, una de las amenazas más graves que pesan sobre la sociedad. Nos ha sorprendido que en el decálogo de medidas propuestas no tenga un lugar destacado la adecuación del alumbrado público, un asunto que está especialmente en manos del Ayuntamiento. El consumo de energía para la iluminación de calles y monumentos es una considerable fuente de emisión de CO2, que no está precisamente optimizada. Que sepamos, no se ha acometido un estudio para valorar el grado de ajuste a las recomendaciones de la Comisión Internacional del Alumbrado, ni el potencial de ahorro. Pero según la experiencia de ciudades con iluminación de características semejantes a la de Donostia, se estima que aquí la adecuación del alumbrado reduciría emisiones en 4.000 (cuatro mil) toneladas de CO2 al año y su factura eléctrica bajaría de 1.750.000 a cerca de 1.000.000 euros anuales. Además, combinando las medidas de eficiencia con las de control de la iluminación que nuestras asociaciones recomiendan, se conseguiría eliminar la intensa contaminación lumínica que hay ahora. Como se ve, las ventajas medioambientales de la estrategia serían de gran calado.Cierto es que más de la mitad de las luminarias urbanas deberían ser modificadas, y eso acarrea un gasto, pero seguramente no superior a los 5 millones de euros que ahora proyectan dedicar a placas fotovoltaicas. En todo caso, el ahorro inherente en consumo eléctrico permitiría amortizar en pocos años la nueva instalación. Quizá, sabiendo que la ciudadanía está (mal)acostumbrada desde hace tiempo a niveles de alumbrado excesivos, quedaría una labor de información y justificación de los cambios llevados a cabo. Aclarando que se trata de eliminar la luz superflua (la que se envía al cielo, a las ventanas de las viviendas, o las áreas naturales), y que lógicamente el objetivo es lograr un alumbrado que garantice plena seguridad vial sin incurrir en sobreconsumos de energía. Esta labor educativa puede antojarse ardua; pero la vocación por difundir y fomentar actitudes cívicas (ligadas ahora al consumo racional de energía) ha sido siempre un rasgo propio de los grandes alcaldes.